Nissen fundoplicatura

Envíado por Dr. Carlos Edgardo Escobar

El objetivo de la cirugía antirreflujo es restablecer la competencia del cardias, mejorando mecánicamente su función para evitar la aparición de reflujo gástrico al esófago, mientras se preserva la capacidad de deglutir con normalidad, aliviar la distensión gaseosa y vomitar cuando es necesario. El abordaje laparoscópico ha sido ampliamente aceptado en el tratamiento del RGE, tras los buenos resultados obtenidos desde que Dallemagne y cols. la describiera por primera vez. Sin embargo, continúa siendo motivo de discusión el tipo de funduplicatura más adecuada y los detalles técnicos necesarios para obtener unos buenos resultados funcionales. Selección de pacientes Las indicaciones actuales de tratamiento quirúrgico de la ERGE son: Esofagitis erosiva severa (grado III – IV). Pacientes sin lesiones graves de la mucosa esofágica con: Síntomas de reflujo gastroesofágico rebelde al tratamiento médico. Necesidad de tratamiento médico a largo plazo, especialmente en: Pacientes menores de 50-55 años que precisa medicación de por vida por recidiva de la sintomatología tras retirar el tratamiento. Necesidad de dosis crecientes de inhibidores de la bomba de protones para alivio sintomático. Pacientes con buen control de la sintomatología que: Son incumplidores del tratamiento. Presentan dificultades para costear el tratamiento. Prefieren someterse a una intervención quirúrgica que depender de una medicación. Pacientes con alto riesgo de evolución de su enfermedad a pesar del tratamiento médico, “reflujo progresivo”. Entre los factores de riesgo que anticipan la progresión de la enfermedad y una mala respuesta a las medidas médicas están: Reflujo patológico nocturno en la pHmetría de 24 horas. Esfínter esofágico inferior estructuralmente deficiente. Esofagitis erosiva severa desde la primera visita en consulta. Pacientes con síntomas atípicos o respiratorios con buena respuesta a la terapia antisecretora.